lunes, 22 de septiembre de 2008

Apenas comenzando


Es dificil recordar ya mis comienzos como meditador, hace ya casi dos años, empecé como casi todo lo que hago, investigando a través de internet, comprando libros, me regalaron libros sobre el tema. Confieso que me parecía un acto místico, magico, que empezaría a "ver" cosas, a mover objetos con la mente y pare de contar. En el momento oportuno (agosto de 2007), se me da la oportunidad de asistir a mi primer curso de 10 dias en la Técnica Vipassana, estaba un poco asustado, aunque mi esposa acababa de regresar y me habia contado ciertas cosas, pero era un nuevo mundo por descubrir.
Al llegar al centro (que pueden ver en la imagen) y ver la solemnidad del mismo, las reglas, el estilo, el clima, la felicidad y la paz que se respiraba me dije "tanto leer y consultar" y al fin estoy aqui. Mi sueño cumplido.
Pero el clima festivo terminó al comenzar el trabajo a las 4:00 am. con 13 o 14 horas de meditación al dia, con horarios estrictos de comidas y sueño. Sumado al noble silencio (del que les hablaré luego). De verdad es fuerte estar 13 horas contigo mismo, sin donde escapar, sin donde mirar (mas que hacia adentro), enfrentandote a ti, estando por primera vez a solas contigo mismo. Con razón existen personas que se fugan del centro, ruegan por que los vayan a buscar a sacar de ese manicomio (el que uno tiene dentro).
Luego de aceptar el trabajo interno, viene la vedadera magia, tu mente a comenzado a "bajar el volumen", el "ruqui-ruqui" (como dice mi esposa) da paso a un silecio que no reconocemos, que no sabemos que pasa, las personas hablan con los profesores a ver que les sucede. Habia dado el primer paso, habia ascendido al primer peldaño de una escalera de no se cuantos escalones, pero ya estaba alli.

Algo sobre Vipassana y el Buddha



Mucho pudiera decirse de esta milenaria técnica de meditación, creada por un ser excepcional que se "sentó" a descubrir el Origen del Sufrimiento, La causa que Origina el Sufrimiento, La sesación del Sufrimiento y el Camino que conduce a la sesación del sufrimiento. Quien sino el mismisimo Buddha histórico puede haber descifrado para nosotros tan noble verdad.
Lo impresionante de este es que lo hizo solo observando la respiración, como el aire entraba y salia de su cuerpo, las sensaciones que esta producía, la forma como reaccionaba. Encontro que la respiración es el el puente entre nuestro ser y el cuerpo y lo mejor de todo que la mente no es un "humo" una cosa que flota por ahí algo místico, mágico...No... se dió cuenta de que el cuerpo es mente y la mente es cuerpo. Se percató de que si logras apaciguar uno, lo hace el otro también. De manera que al cesar las actividades de la mente, el deseo y la aversión (rechazo) alcanzó el estado supremo del ser La Budeidad, el conocimiento total de la verdad "verdadera" la realidad "tal como es"....."tal y como es".